En 1982, coincidiendo con el Mundial de fútbol en España y el estreno de una novedosa serie de televisión española llamada "Verano Azul", una joven pareja, Eduardo y Marina deciden abrir Bar Piranya, un restaurante en una zona apartada de Barcelona, casi en el extrarradio. El barrio estaba en plena etapa de crecimiento y los trabajadores de la zona y vecinos acabados de instalar en sus pisos recién construidos eran día tras día los clientes más esperados.
Las ollas hervían desde primera hora de la mañana hasta bien entrada la noche y poco a poco, esta joven pareja iba haciéndose con una entrañable y querida clientela.
Era un barrio desconocido, tranquilo y calmado, con escaso tráfico. A 100 metros de la entrada principal de un Parc Güell deshabitado, sin turistas, sin aglomeraciones. Un precioso reclamo para la llegada de más habitantes.
Era como un pequeño pueblo dentro de Barcelona, donde todos se conocían y saludaban.
Diez años más tarde, en 1992 con los J.J.O.O. se empieza a conocer más Barcelona como ciudad turística y en 1994 el Parc Güell es declarado patrimonio de la Humanidad por la Unesco. La Calle Larrard es el escenario de la llegada de cientos de visitantes que quieren visitar el Parc Güell del grandísimo arquitecto Gaudí.
El restaurante adapta un menú para turistas y se convierte en un híbrido entre clientes del barrio y turistas en busca de platos calientes.
En 2002 se celebra el año Gaudí aprovechando su 150 aniversario, es un acontecimiento que atrae gente de todos los países y culturas.
Con el paso de los años, aquello que parecía un pequeño pueblo se va convirtiendo en una zona de comercio dirigida al turismo. Se amplía la plantilla de Bar Piranya y entra la segunda generación mostrando aptitudes, aprendiendo con el paso de los días y aportando un aire fresco y más internacional que nunca.
Tras casi treinta años de duro trabajo, en 2009 esta pareja querida por todos se retira y se produce el relevo generacional.
El restaurante adapta sus horarios a los visitantes del Parc, ofreciendo una cocina abierta de 11 de la mañana hasta las 20h. Con una ámplia carta llena de imágenes para agilizar el trabajo.
Es una segunda generación con las pilas cargadas, llenos de alegría y entusiasmo. Con ganas de mejorar y de hacer que ésto, que es lo que hemos hecho toda la vida, siga funcionando.
Después de un año adaptándonos a los cambios, en 2010 empezamos a diseñar nosotros mismos las camisetas del uniforme. Cada temporada sacamos el nuevo modelo y, tras la insistencia de nuestros clientes en querer adquirirla como recuerdo de su agradable estancia con nosotros, pensamos en abrir una tienda on-line donde poder hacelo. Nuestra pretensión no es vender miles de ellas, sinó ofrecer al cliente aquéllo que le interesa.
En 2012 cumplimos 30 años y queremos seguir mejorando y aguantar 30 más, y ver la siguiente generación.
SI estás en Barcelona, no puedes dejar de visitar el Parc Güell y dentro de tus planes está pasar a visitarnos. Enta y disfruta!!se p
aire fresco
Celebramos los 30 años
Park Güell de Gaudí
La crisis afecta al drac